Femicida confiesa ubicación de cuerpo en Chiriquí a cambio de cambio de celda

Las autoridades panameñas lograron recuperar restos humanos en una finca ubicada en el corregimiento de Guacá, distrito de David, gracias a la colaboración del confeso femicida José Atencio, alias “Chungo”, conocido como “El terror de las chiricanas”, actualmente detenido en el Centro Penitenciario de Llanos de Icaco.

Según fuentes vinculadas al caso, Atencio indicó a los investigadores la ubicación exacta donde presuntamente dejó el cuerpo de la joven bocatoreña Anabel Valdivia, cuyo paradero era desconocido desde hace meses. Como parte de un acuerdo de colaboración, el privado de libertad habría recibido un beneficio carcelario que incluyó su traslado al pabellón 12, de máxima seguridad, por temor a represalias.

Las diligencias fueron coordinadas por la Fiscalía de Homicidios del Ministerio Público y contaron con el apoyo de especialistas del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses (IMELCF), la Dirección de Investigación Judicial (DIJ), unidades de Criminalística y Fotografía Forense.

Durante la segunda inspección en el área, de difícil acceso y ubicada cerca de una quebrada profunda, el antropólogo forense del IMELCF logró ubicar restos óseos adicionales que no fueron encontrados en la primera diligencia.

Las pruebas de ADN a los restos recolectados están en curso y serán fundamentales para confirmar si se trata de Valdivia, como se presume.

El caso ha generado conmoción en la comunidad chiricana y reabre el debate sobre los beneficios penales a cambio de colaboración, especialmente en casos de violencia de género. La investigación sigue en desarrollo y las autoridades han reiterado su compromiso con la búsqueda de justicia para las víctimas.