MiAMBIENTE ordena suspensión de extracción de gravilla en el río San Félix por irregularidades

Técnicos de la Dirección Regional del Ministerio de Ambiente (MiAMBIENTE) en la comarca Ngäbe Buglé inspeccionaron las actividades de extracción de gravilla en el cauce alto del río San Félix, ubicado en la comunidad de Sabanita, corregimiento de Susama, distrito de Nole Duima. Tras el análisis, la Alcaldía de Nole Duima ordenó la suspensión temporal de dichas actividades realizadas por la empresa TRANSEQ, S.A., debido a la falta de documentos y permisos requeridos.

Durante la diligencia, se constató que la extracción de material pétreo, incluyendo piedras y gravilla, generaba alta turbulencia en el agua, afectando la planta potabilizadora de San Félix y dejando el líquido turbio para el consumo de los residentes de la región. Adicionalmente, se detectó que cerca del área opera una planta trituradora de piedra, utilizada para proyectos de mejoramiento vial en comunidades de Chiriquí y la comarca.

Al ser requeridos los permisos correspondientes, los responsables de la empresa en el sitio no pudieron presentar la documentación. Según indicaron, la autorización había sido otorgada por el alcalde del distrito de Nole Duima, Hipólito Jiménez.

Los técnicos también señalaron que la planta trituradora genera polvo, ruido y emisiones de humo, lo cual ha despertado preocupación entre los moradores del área.

El director de MiAMBIENTE comarcal, Valerio Gómez, informó que, tras la inspección, sostuvo una reunión con autoridades municipales y tradicionales, el director comarcal del Ministerio de Obras Públicas (MOP) y un representante de TRANSEQ, S.A. Durante el encuentro, se orientó sobre la necesidad de cumplir con los trámites administrativos y obtener los permisos de entidades como el Ministerio de Comercio e Industrias (MICI), el MOP y MiAMBIENTE antes de realizar actividades extractivas.

Por su parte, el alcalde Jiménez destacó que la paralización temporal no busca detener el desarrollo de los proyectos viales, sino garantizar que estos se realicen sin afectar el cauce del río ni la calidad del agua que consumen los habitantes de la zona y de San Félix en Chiriquí.

"La empresa debe cumplir una serie de pasos para avanzar, asegurando que no se comprometa el afluente ni los derechos de los moradores," concluyó Gómez.