Bocas del Toro retoma el pulso económico tras la crisis: comercio se reactiva, pero la recuperación total tomará más tiempo

La provincia de Bocas del Toro comienza a recuperar parte de su dinamismo económico luego de las afectaciones causadas por más de un mes de protestas, cierres de vías y pérdidas millonarias que paralizaron al sector productivo. Aunque las secuelas aún son visibles, diversos actores locales coinciden en que se percibe una reactivación progresiva, especialmente en las zonas turísticas.

Senen Briceño, abogado y periodista residente en la provincia, explicó que la región muestra una lenta pero constante estabilización, impulsada por la inyección económica destinada a la rehabilitación de las plantaciones bananeras y por los preparativos de Chiquita Panamá, que proyecta retomar la cosecha entre marzo y abril de 2026.“La situación está tomando una normalidad poco a poco. Ya se ve un comercio más activo”, indicó.

No obstante, el impacto de la crisis dejó consecuencias profundas. Decenas de restaurantes, tiendas, clínicas y otros negocios que cerraron durante los bloqueos no han podido reactivar operaciones debido al daño en infraestructura, la pérdida de inventarios y los compromisos financieros pendientes.“Muchos comercios no han podido reaperturarse porque el daño fue muy grande”, advirtió Briceño, señalando que la recuperación total podría extenderse hasta 2026.

Isla Colón lidera la recuperación turística

Pese al golpe económico, Isla Colón ha logrado retornar a sus niveles de actividad en menos de un mes tras levantarse los cierres. Hoteles, tour operadores y restaurantes muestran mayor movimiento, apoyados por la demanda turística que persiste durante la temporada alta.“Bocas del Toro sigue con prosperidad… Isla Colón continúa proyectándose en la actividad turística”, aseguró Briceño. Sin embargo, insistió en que esta reactivación requiere mayor respaldo estatal para promover nuevos proyectos turísticos.

En las calles, residentes reconocen mejoras en movilidad, actividad comercial y seguridad, aunque el comercio en Changuinola y Almirante sigue por debajo de lo observado en años anteriores.

Seguridad estable, pero con vigilancia reforzada

Según Briceño, los estamentos de seguridad mantienen control en la provincia, registrándose únicamente los hechos delictivos habituales de la temporada. Aun así, considera necesario fortalecer la presencia policial en áreas comerciales debido al incremento de actividades económicas en diciembre.

Diversificación económica: el desafío pendiente

Uno de los principales llamados es reducir la dependencia del monocultivo del banano, una vulnerabilidad que quedó expuesta durante la crisis. Entre las iniciativas propuestas destacan:

• Impulsar inversiones en el sector cacaotero.

• Modernizar la infraestructura turística.

• Reactivar la zona franca de Almirante.

• Potenciar proyectos de paseos marinos en Almirante e Isla Colón.

“Se necesita mayor inversión pública para que la empresa privada vuelva a apostar por la provincia”, subrayó Briceño, alertando que la falta de oportunidades está provocando la migración de residentes hacia otras provincias.

Aunque Bocas del Toro avanza hacia la recuperación, la reconstrucción completa de su estructura económica dependerá de las decisiones gubernamentales, el apoyo al sector productivo y la resiliencia de sus comunidades en los próximos meses.