🔹 Graves pérdidas agrícolas en Barú y Alanje tras las inundaciones causadas por el huracán Melissa

Las persistentes lluvias que azotaron la provincia de Chiriquí durante los últimos días, provocadas por los efectos indirectos del huracán Melissa, han dejado un fuerte impacto en la producción agrícola de los distritos de Barú y Alanje.

Cientos de hectáreas de plátano, arroz, frijol y maíz quedaron bajo el agua, principalmente en las comunidades de Baco, Rodolfo Aguilar Delgado, Divala y Nuevo México, donde los productores aseguran haber perdido gran parte de sus cosechas.

“Es una pérdida total. El río Chiriquí Viejo se desbordó y el agua entró a las fincas. Teníamos cultivos listos para cosechar, pero todo quedó dañado”, explicó un productor de Divala, que prefirió mantener su nombre en reserva.

El desbordamiento de canales de desagüe y la saturación de los suelos agravaron la situación, afectando tanto a pequeños como medianos agricultores. Algunos advierten que la recuperación podría tardar semanas o incluso meses, dependiendo de las condiciones climáticas y del apoyo que reciban.

Ante este panorama, los productores han solicitado al Ministerio de Desarrollo Agropecuario (MIDA) la evaluación de los daños y la entrega urgente de insumos agrícolas —como abonos y semillas—, además de trabajos de limpieza y rehabilitación de canales para evitar nuevas inundaciones.

Autoridades locales y regionales informaron que se mantienen las inspecciones de campo para cuantificar las pérdidas y coordinar acciones de apoyo a las familias afectadas.

Las lluvias en la provincia han disminuido durante las últimas horas; sin embargo, los organismos de emergencia mantienen la alerta en las zonas cercanas a ríos y quebradas debido a la saturación del terreno.